Astrid Bell ha adoptado el apellido Karsdorp desde el verano de 2018 en el que se casó con Rick, actualmente jugador de la Roma cedido en el Feyenoord. A pesar de tener solo 23 años, la modelo va rápido, tanto en su vida privada como en su popularidad. Ya está casada, ha dado a luz a su primer hijo y suma 40.000 seguidores en Instagram que alucinan con sus ardientes posteos.
Los últimos años en la vida de Astrid han sido un no parar. Conoció a Rick Karsdorp en Países Bajos, un futbolista curtido en las categorías inferiores del Feyenoord. Pero incluso antes de eso, a Astrid ya le gustaba recorrer mundo. Con apenas 18 años recorrió Cuba, California, Las Vegas o Aruba. Y no se alojaba precisamente en hostales: no, a Astrid le va el lujo como demuestra su muñeca, donde desde hace años exhibe un reloj de oro de los que hacen época.
Pero la vida de la modelo neerlandesa dio un giro cuando a su novio Rick lo fichó la Roma en 2017. Fue entonces cuando empezó a alternar viajes entre Países Bajos y la capital italiana. No sabemos si a Astrid le entró la prisa o fue Rick el que dio el primer paso, pero la pareja decidió pasar por el altar al verano siguiente. No cabe duda de que fue una época muy especial para Astrid que dejó buena cuenta de su despedida de soltera y de su boda en redes sociales. Todavía hoy recuerda de vez en cuando la ceremonia con algún posteo.
No es que sea obligatorio tener niños una vez que te casas, pero Rick y Astrid decidieron que era el momento también para ser papás. Y desde hace unos pocos meses, Astrid ya luce estupenda con su bebé… pero siempre en entornos ideales: piscinas deslumbrantes o restaurantes de lujo en Ibiza. ¡Si hasta el bebé va con ropa de Moschino! Suponemos que el bebé también hará popó y esas cosas, pero en el perfil de Astrid todo es de color de rosa.
No obstante, nuevos cambios se han producido en la vida del matrimonio estos últimos meses, además de la llegada del primer hijo. La mala temporada 2018/2019 de Karsdorp en Roma, arrastrando numerosas lesiones, han provocado que el club italiano haya cedido al jugador de nuevo al Feyenoord. Tampoco parece mal plan que el padre vuelva a casa ahora que la familia ha crecido y necesita un entorno lo más tranquilo posible.
Aunque más allá de sus redes Astrid no da muchas pistas sobre su profesión, a buen seguro que podría ganarse la vida como modelo ya que exhibe un cuerpo de infarto siempre que puede. Con 40.000 seguidores en Instagram también podría explotar sus redes como influencer, pero en este momento parece que Astrid tiene suficiente con cuidar a su bebé Kylian.