Aunque Playboy ya no es lo que era, sigue eligiendo con mimo quién ocupa sus portadas. Cuando Barbara Evans se convirtió en conejita en 2011, los lectores de la edición brasileña de la popular revista quedaron extasiados con su belleza. Lo mismo que el peruano Paolo Guerrero, con el que la modelo brasileña salió casi dos años. Soltera y sin compromiso, Barbara está dispuesa a volver a ser una WAG, si se presenta un candidato que lo merezca.
Nacida en Rio de Janeiro en 1991, Barbara Evans es hija de la presentadora, modelo y actriz brasileña Monique Evans y un empresario británico, lo que explica su sensual físico: una combinación de la voluptuosidad carioca y la dulzura europea. No obstante, poco después de que naciera, sus padres se divorciaron y ella se quedó en Brasil junto a Monique.
No tardó en seguir los pasos de su madre y comenzó a desfilar a los 15 años. Pocos años más tarde le llegó su gran oportunidad. La edición brasileña de la revista Playboy le ofrecía ser la chica del mes y ocupar su portada. Barbara no dudó en aceptar el reto y de allí surgió un famosa sesión de fotos que sigue maravillando a los fans de la modelo carioca.
Su primera relación conocida fue con Kayky Brito, actor brasileño que también empezó muy joven a actuar tanto en cine como televisión. Pero su relación más sonada fue con Paolo Guerrero, mítico delantero peruano que suma más de 80 internacionalidades y 32 goles, siendo el máximo goleador histórico del combinado sudamericano.
Fue en 2013 cuando Barbara y Paolo cruzaron sus caminos. El futbolista acababa de dejar Europa después de una década en la Bundesliga (primero en el Bayern Múnich y después en el Hamburgo). Su fichaje por el Corinthians le llevó coincidir en Sao Paulo con Barbara y empezaron a salir.
Fue una relación corta pero intensa. Según se dice, la causa de su separación estuvo en los celos del jugador que no toleraba que su novia colgara tantas fotos ligera de ropa, lo que provocaba la sorna de algunos de sus compañeros. Pero Barbara tiene otra versión de los hechos: «“Él se fue a Perú y yo me quedé, porque tenía trabajo en Brasil. Cuando volvió ya estaba con otra». Barbara alude a Alondra García Miró, modelo peruana y actual pareja de Guerrero.
Aunque Barbara señaló «tener anastrozole stacking anastrozole tablets rich drugs buenos recuerdos de Guerrero y desearle lo mejor», la prensa brasileña llegó a publicar poco después de la ruptura una noticia un tanto bizarra en la que se aseguraba que la mala racha del delantero con el Flamengo (club al que llegó procedente del Corinthians) se debía a que su ex Barbara había contratado a un hechicero para que le echara mal de ojo. Pues el supuesto brujo no ha hecho mal su trabajo puesto que Guerrero está actualmente suspendido por la FIFA por haber dado positivo por cocaína en un control antidopaje y podría perderse el Mundial de Rusia…
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Tags: Barbara Evans, C. R. Flamengo, Paolo Guerrero
