Pese a que Joana Sanz es tinerfeña, para la modelo y su marido Dani Alves, Barcelona siempre será su casa puesto que ambos se conocieron en la Ciudad Condal hace ya seis años. A buen seguro que Alves hizo todo lo posible por ingresar en la disciplina azulgrana para mudarse con Joana a Barcelona y tal vez establecerse en ella definitivamente.
Hace ya más de cinco años que Dani Alves dejó el Barça por la puerta de atrás. Lo hizo resentido con la directiva que, a su juicio, no valoró en su justa medida su labor en los años precedentes, la mejor época de la historia del club. Pero el fútbol es una historia de ciclos, y aquel ciclo se había terminado para Alves en el Barça. Pero el dicharachero lateral brasileño no había dicho su última palabra como futbolista, ni mucho menos, cosechando éxitos en Turín y en París para finalizar su carrera en el Sao Paulo.
O eso creíamos todos, pero Dani siempre tiene una bala en la recámara y aprovechando que el Barça no tiene dinero ni para pagar el agua con el que se riega el césped del Camp Nou se ofreció para ayudar a uno de los clubs de su vida. Y a Laporta no le pareció mal plan. Pero a buen seguro que Alves no solo estaba pensando en el Barça cuando se ofreció a jugar ‘casi gratis’: su mujer Joana Sanz también pesó y mucho en su oferta.
Ya hace seis años que Joana y Dani se conocieron en Barcelona. Pese a que Joana tiene diez años menos (y unos cuantos centímetros de más) que el lateral, la chispa saltó entre ambos y ya no se separaron nunca más. A pesar de algunas críticas de sus seguidoras que la modelo no tomó muy bien en su día, poco a poco Joana aprendió lo que significa ennoviarse con una estrella del fútbol.
A buen seguro que cuando tuvieron que dejar Barcelona para irse Turín lo hicieron con pena, pero la vida sigue. Y cuando dejaron Turín para irse a París, Joana no pudo ser más feliz al vivir un par de años en su ciudad favorita, además de la capital de la moda lo que sin duda ayudó a su carrera que ya era muy prestigiosa por entonces protagonizando campañas para Sony, Samsung, Yves Saint Laurent o Jimmy Choo.
Y tras dos años en Sao Paulo viviendo una experiencia diferente al otro lado del charco en el país natal de Dani, de regreso a casa, donde prendió la llamar del amor y donde Joana volverá a disfrutar de las míticas galopadas de Dani Alves por la banda derecha del césped del Camp Nou.