Son una de la pareja de moda en el fútbol español, la jinete e hija de Luis Enrique Sira Martínez y el reciente fichaje millonario del Barça Ferrán Torres. Ambos tienen 21 años y comparten su éxito en sus respectivos deportes. Bien es cierto que la jinete catalana no tiene la repercusión de su novio futbolista, pero ya ha ganado concursos de gran prestigio. Pero la fama y el mundo del fútbol no le cogerán por sorpresa ya que es hija de Luis Enrique, actual técnico de la selección española.
Los rumores ya apuntaban desde hacía meses que el por entonces delantero del Manchester City Ferrán Torres y la hija mediana de Luis Enrique tenían una ‘bonita amistad’. Según parece, Sira Martínez habría coincidido con Ferrán en algún partido de la selección, de la que Sira es muy fan, no en vano su padre entrena al equipo… Un intercambio de números de teléfono y un par citas habrían estrechado la relación entre ambos, que llevaron muy discretamente.
Pero cuando tu padre es uno de los ex futbolistas más famosos de España, ex técnico del Barça y actual entrenador de la selección, y tu amigo especial uno de las grandes promesas del fútbol español, tarde o temprano el rumor se hace público. Ninguno de los dos negó ni afirmó, pero la llegada de Torres al Barça no hizo sino aumentar los cuchicheos hasta que el delantero publicó un stories en su cuenta de Instagram con la presencia de Sira en uno de sus concursos hípicos, manera de confirmar que su relación va en serio.
Aunque ambos son muy discretos, están más que acostumbrados a lidiar con la fama. A sus 21 años, Sira es la segunda hija de Luis Enrique. Nació y se crio en Barcelona, aunque su nombre, como el de sus hermanos, denotan su origen asturiano por parte de padre. De lejos viene su afición por la hípica que, al parecer, no contó con la aprobación paterna en un primer momento según ella misma afirmaba en una entrevista para Vanity Fair de hace algo más de un año.
Fue esta entrevista la primera que concedía Sira como personaje público, algo que a buen seguro tampoco debió ser muy bien visto por su padre, defensor acérrimo de su privacidad. Pero es que la situación de la familia era muy especial debido al fallecimiento de la hija pequeña de la familia: Xana murió a los 9 años por un desgraciado cáncer de huesos. A la pregunta sobre cómo llevó Sira la muerte de su hermana pequeña, la jinete respondió con mucha madurez: “Lo que he vivido con mi hermana me ha hecho ver la vida de otra manera. Antes me agobiaba ante el mínimo problema. Ahora me paro a pensar que hay que vivir y disfrutar de cada momento. No se sabe cuándo va a ser nuestro final”. Bien por ti, Sira.
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